
Solange lució melena rizada mientras cantaba “Don’t touch my hair” | Sergio Albert (PS)
La música negra de última hornada, con Solange y Miguel como máximos representantes, se ha impuesto en los principales escenarios del Primavera Sound, aunque el acontecimiento más sorprendente de la primera jornada del festival ha sido el concierto que ha ofrecido Arcade Fire sin previo aviso.
El recital de los canadienses ha sido de los que se recuerdan. Han tocado por primera vez dos temas inéditos de su nuevo disco y lo han hecho por sorpresa, en un escenario abierto por los cuatro costados sobre el que la banda ha logrado crear magia.